En su columna del día de ayer, Ricardo Medina Macías defiende la propuesta hacendaria presentada por la presidencia de la república. Como bien dice, se gastará de manera más eficiente el dinero (algo que de cualquier manera está por verse). Sin embargo, esto está lejos de ser suficiente. El gasto público por sí solo no genera riqueza. La "reforma" en ningún lugar indica lo que Calderón prometió una y otra vez: una tasa fija competitiva. Tanto la propuesta de Fox, con su IVA a los alimentos y medicinas, como la de Felipe Calderón, con el CETU y la eliminación de algunas deducciones, tienen un propósito en común: aumentar la recaudación.
Regresando a lo que menciona Medina, en efecto, es de suma importancia mejorar cómo se gasta el dinero de todos los mexicanos. Sin embargo, mejorando el gasto público no seremos un país competitivo. Las metas de crecimiento económico difícilmente se logran cuando en lugar de incentivar la inversión de capital, se hace un enfoque en la recaudación y en su distribución. Según Felipe Calderón "tenemos una deuda con los mexicanos más pobres". Yo no sé cómo piensa saldarla mediante propuestas que no incentivan la inversión, es decir, más y mejores empleos.
Regresando a lo que menciona Medina, en efecto, es de suma importancia mejorar cómo se gasta el dinero de todos los mexicanos. Sin embargo, mejorando el gasto público no seremos un país competitivo. Las metas de crecimiento económico difícilmente se logran cuando en lugar de incentivar la inversión de capital, se hace un enfoque en la recaudación y en su distribución. Según Felipe Calderón "tenemos una deuda con los mexicanos más pobres". Yo no sé cómo piensa saldarla mediante propuestas que no incentivan la inversión, es decir, más y mejores empleos.